Esquiar, andar en trineo, explorar la montaña, parapentes o hasta el divertido tubing. Son muchas las actividades para entretenerte con tu familia si nieva. Eso sin contar con los hermosos paisajes nevados que completan la experiencia. Pero ¿Cómo puedes combatir el frío intenso sin sentirte atrapado debajo de tu chaqueta?
Pues la clave está en encontrar ropa para la nieve cálida, cómoda y que deje espacio para el movimiento. Ha de ser ligera y con un tejido no demasiado grueso si es de calidad. Recuerda que lo que no quieres es mojarte, así que los textiles sintéticos suelen ser mejores en este aspecto. Veamos cuales son las piezas que no debes dejar de tener.
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Piezas infaltables en el closet y en la maleta
Imagina lo mal que la pasarás si no tienes la ropa para ir la nieve necesaria. Es probable que debas quedarte encerrada en el hotel sin disfrutar los paseos. Evítalo siguiendo esta guía ideal para tu viaje a la nieve.
Anoraks
Una buena parka o anorak es un tipo de abrigo impermeable especial para climas muy fríos, vientos fuertes o lluvia. Normalmente está elaborado con piel, imitaciones de esta o material sintético. Los más tradicionales cubren más allá de la cintura y poseen capucha. Aun así es posible encontrarlos con infinidad de diseños y variaciones.
El anorak es utilizado para la capa más externa de la ropa para la nieve. Aunque los de mejor calidad tienen un precio alto, son muy versátiles. Es decir, los puedes emplear fuera de la montaña cuando llueve o simplemente quieras protegerte de un vendaval. Conservan muy bien el calor, lo que lo vuelve un must en tu outfit de invierno.
Gorros
Lejos de ser un simple accesorio, los gorros son una pieza necesaria dentro de la ropa para la nieve. Gracias a la moda a día de hoy tiene completa aceptación entre grandes y pequeños. Sus estilos son tan diversos que pueden cubrir la cabeza, tener orejeras o ser enterizos (es decir, alcanzan a cubrir buena parte del rostro y cuello).
Claro, estos últimos son más adecuados para quienes se adentran en la montaña a practicar un deporte. Son importantes pues mantienen la cabeza, oídos, nariz e incluso cuello, lejos del congelamiento. Además, si te gusta el esquí u otra actividad busca uno que siente bien debajo del casco.
Guantes impermeables o manoplas
Así como los pies, las manos son una de las partes más sensibles y expuestas al frío. A pesar de ello debemos darle cierta movilidad para sujetarnos sin dejar de lado la protección. A este respecto los guantes impermeables son los predilectos. Aléjate de los guantes de algodón u otro material absorbente. La manopla, por su parte aporta menos agilidad pero mayor resistencia al frío.
Botas y calzado de aprés Ski
Los pies también deben estar resguardados contra el clima extremo. Por eso hacerte con unas botas es esencial. Busca que sean de suela gruesa, rugosa, resistente e impermeable. El material de fabricación igual debe ser resistente al agua y mantener el pie confortable. No debería hacerlo sudar ni causar fricción.
Igualmente, mientras más altas sean mayor confort te aportarán. Por otro lado, tienes las botas de descanso o aprés Ski (después de esquiar) En sentido estricto, son más adecuadas para la terraza, el bar o restaurante interior. Suelen ser afelpadas por dentro y acolchadas en sus bordes. Recuerda complementarlos con calcetines.
Pantalones o monos
Desde tejidos Gore Tex, fibras sintéticas, polar y demás textiles. Sea cual sea el material que escojas, tienes que tener el pantalón indicado entre la ropa para ir a la nieve. Este va encima de las mallas térmicas y debería ser resistente, flexible, transpirable y duradero. Será aún más útil si tiene bolsillos y recubrimiento en la zona de las rodillas para los niños.
¿Cómo usar la ropa para la nieve?
Una vez salgas de esa ducha calientita es momento de vestirte ¿Y qué debes colocarte primero? Pues la ropa para la nieve más cercana al cuerpo debe ser transpirable. Es decir, debe dejar salir la humedad corporal hacia fuera permitiendo refrescarte aun haciendo ejercicio.
Claro, esta cualidad deben tenerla también la segunda o tercera capa, aunque sea en menor medida. Por ejemplo, camisetas térmicas de tela suave (sintéticas, elastan) y mallas transpirables. También la ropa interior debería ser de lo más cómoda. Con todo, es importante evitar por completo el algodón.
Tras cubrir tu cuerpo es aconsejable colocar encima piezas impermeables. Ten presente que si estás mojado, tu temperatura bajará mucho más rapido. Finalmente, sobre todo para la tercera capa se buscan abrigos que permitan frenar el viento. Claro, estos deben ser fáciles de retirar en caso de comenzar a tener calor. Deben ser piezas que ofrezcan calidez sin sofocarte.
Accesorios que completan el outfit de invierno
Como sabes, tienes que buscar gorros y guantes impermeables que luzcan bien con el resto del vestuario invernal. Sin embargo, estos no son los únicos accesorios que te mantendrán cómoda. Las bufandas, por ejemplo, abrigan lo suficiente tu cuello para que no entre el frío. No solo eso, sino que son un plus de lo más elegante.
Es recomendable optar por una bufanda grande dependiendo del resto de las prendas que hayas elegido. Además, son fabricadas a partir de materiales naturales o sintéticos (lana, algodón, polar, entre otros) Por lo cual hay una gran variedad de diseños a escoger. Así no solo la podrás usar para estar fuera sino también para estancias cubiertas.
Cabe destacar que las bufadas son más apropiadas para los adultos y no para los niños ¿La razón? Estos suelen arrastrarlas por el suelo y mojarlas. Hasta pueden quedarse enredadas en los trineos del pequeño. Por otro lado, tienes las orejeras, una alternativa más específica si no te atraen mucho los gorros.
Son ideales si tienes propensión a sufrir de infecciones o enfermedades auditivas. Pueden estar recubiertas de felpa, lana o poliéster. Y si quieres un terreno intermedio prueba las diademas tejidas que recubren toda la zona de los oídos. Son súper confortables, fáciles de colocar y te darán el toque de originalidad que buscas.
No olvides, por nada del mundo los calcetines. Estos forman parte importante de la primera capa e igual pueden ser de material sintético. Búscalos finos y siempre colócalos por encima de las mallas. No tienes excusa para no protegerte del frío está vez. Ya tienes todo lo que necesitas en ropa para la nieve.