La tendencia del “granny hair” o de lucir las canas llegó a Europa desde Estados Unidos hace pocos años. Por fin llega una moda femenina que deja atrás décadas en las que las canas estaban cargadas de estigma de vejez y pérdida de belleza.
Sin embargo, esta nueva tendencia admite dos direcciones. Por un lado, la que toman mujeres jóvenes que no tienen canas (o muy pocas) de colocarse un tinte gris, con algún matiz en tono pastel (violeta, rosa, azul). En este grupo encontramos conocidas celebrities como Rihanna, Lady Gaga o Ariana Grande, entre otras.
Otra dirección de esta moda es la que siguen mujeres con canas naturales, que renuncian gustosamente al tinte reivindicando así su madurez y luciendolas con estilo pero, sobre todo, con orgullo. A esta tendencia se han apuntado Meryl Streep, Hellen Mirren, Jamie Lee Curtis, Sharon Stone o Lola Herrera, entre muchas otras. De esto hablaremos en este artículo.
Actitud, elegancia y sofisticación
El cabello gris, tradicionalmente relacionado con el envejecimiento, sometía a las mujeres a la invisibilidad al finalizar su etapa fértil. Aquí la desigualdad se hace evidente, porque el hombre canoso aún se percibía atractivo.
Lucir las canas hoy en día, reivindica a una mujer sexy a pesar de su edad. Pero sobre todo, reivindica el derecho a abandonar la tiranía de ocultar el paso del tiempo con actitud, elegancia y un punto de irreverencia. Deja atrás prejuicios sociales que marcan la forma de envejecer de manera única para todos. Abre la posibilidad de que cada mujer marque su manera y ritmo aceptando este proceso de forma satisfactoria y saludable.
Dar el paso
Cada vez son más las mujeres que deciden dejar el tinte para lucir una cabellera plateada, abandonando las convenciones estéticas basadas en el culto a la juventud.
En toda la red abundan historias de mujeres que hicieron “la transición”. Algunas lo hicieron por apuntarse a la moda, pero las que son ya algo maduras pasaron por un punto de inflexión, algo que hizo “clic” en ellas.
Existen muchísimas razones, como tener el pelo o el cuero cabelludo destrozado por el tinte, o no acertar con el color para tener un look “natural”, o aborrecer la liturgia mensual del tinte, y, finalmente, algunas simplemente tuvieron la intuición de que el tono plateado les iría mejor.
¿Por dónde empezar?
Existen muchas técnicas de color para que la transición entre el cabello gris y el tintado no sea abrupta. Desde los tintes matizantes hasta las mechas tipo “hilos”, pasando por opciones aún más transitorias, pueden ayudarte en esta etapa. Acude a un buen colorista y escucha sus propuestas.
Paralelamente, o a continuación (lo decidirás con tu peluquero) hay que lucir un corte de pelo actual y moderno. Muchas mujeres han apostado por el corte “pixie”, el “bob”, o sus versiones asimétricas.
El principal enemigo del cabello plateado es el tono amarillo que puede adquirir, pero también es posible que su textura cambie. Para tenerlo en buenas condiciones es necesario utilizar productos específicos para el pelo gris.
Y ten siempre presente que celebrar la edad e individualidad sin renunciar a las tendencias actuales forma parte de un “envejecimiento inteligente”.