En la tradición china, se cree que existe un flujo constante de energía en los lugares. Específicamente, de dos energías complementarias: el ying y el yang. Cuando se presentan desequilibrios entre ambas fuerzas, disminuye el chi, que es la energía vital.
Estos cambios se perciben como vibraciones negativas, tristes y deprimentes. Si sientes que tu hogar se ha llenado de estas emociones, es probable que necesites renovar las energías. Sobre todo, por el efecto que causan en el estado de ánimo de quienes viven allí.
Para equilibrar el ying y el yang de nuevo, se utiliza el feng shui. Una práctica milenaria cuyos principios ayudan a limpiar las energías para que abunden sentimientos de bienestar y armonía en los espacios.
Contenidos de la Página
Qué es el feng shui
Se trata de un arte ancestral chino que promueve el equilibrio de las energías en los lugares. Al ponerlo en práctica, se elimina todo lo negativo. En cambio; se atrae la prosperidad, la buena salud, el éxito y el amor. Su efecto positivo se extiende a todos los ámbitos de la vida de quienes viven en el hogar e incluso, de quienes lo visitan.
Esta práctica se basa en la creencia de que la vibra de los espacios determina lo que le ocurre a las personas. Por lo tanto, si tu entorno es limpio y agradable, tus objetivos se cumplirán como los planeaste y te sentirás bien contigo misma.
Los principios básicos del feng shui se relacionan con los objetos que se encuentran en tu hogar. Especialmente, con cómo los organizas y mantienes. Cada cosa emite energía, hasta la más sencilla y pequeña. Por lo tanto, el objetivo del feng shui es canalizar esta energía para que te sea favorable.
Cómo depurar las energías negativas con feng shui
Ordena los espacios
El principio fundamental del feng shui es mantener los espacios limpios y ordenados. De esta manera, la percepción del ambiente se hace más armoniosa y agradable.
Seguramente recuerdas haber visitado una casa desordenada y haberte sentido incómoda. Esto ocurre porque el desorden reduce los niveles de energía y hace a las personas menos productivas y más irritables. Justamente ese es el efecto que queremos evitar en tu hogar.
Para comenzar a organizar tu casa, comienza por la entrada principal. Luego, pasa a la zona central y finalmente, a las habitaciones y baños. En cada espacio, elimina las cosas que no son necesarias y ordena las restantes.
Cuando hayas terminado, experimentarás un alto nivel de energía, así como una mayor claridad mental y bienestar.
Barre toda la casa
Los movimientos que haces al barrer constituyen una forma de sacar la carga negativa de los ambientes.
Para crear un cambio energético notable, los practicantes del feng shui barren desde las habitaciones hasta la puerta principal pasando por todos los espacios de la casa. Abren la puerta de la entrada y llevan el polvo hacia afuera.
Así, ahuyentan las malas vibras del pasado e invitan el comienzo de un nuevo presente.
Limpia y abastece la cocina
De acuerdo con el feng shui, la cocina está relacionada con la capacidad de generar dinero. Por ello, una cocina abastecida y libre de suciedad y desorden atrae la riqueza y la prosperidad.
Las claves para equilibrar las energías en este espacio se encuentran en la nevera y en la despensa. Cada una debe estar llena de alimentos frescos e ingredientes que se utilicen con frecuencia en las comidas. Así mismo, las cosas que contienen deben organizarse y agruparse por tipos.
También sugerimos remover los restos de alimento de la superficie de las estufas y mantener la mesa de la cocina despejada. De esta manera, la energía del ambiente se alineará con tus propósitos.
Báñate con sal marina
Después de limpiar los espacios de tu casa, debes purificar las energías de tu cuerpo. De esta manera, tanto tú como tu entorno estarán preparados para recibir cosas buenas y vivir experiencias positivas.
Si tienes una bañera, agrega una cucharada de sal marina al agua y sumérgete durante unos 20 minutos. De lo contrario, frota un poco en tu cuerpo mientras te das una ducha.
Este baño renueva las energías internas de inmediato. Y también es útil después de pasar varios días de mal humor o vivir una serie de eventos desafortunados.
Deshazte de las cosas rotas
Solemos aferrarnos a objetos rotos por lo que alguna vez significaron. También es común guardar cosas en este estado pensando que se podrán reparar algún día. Sin embargo, pasan meses y años sin hacer nada más que ocupar espacio.
Según el feng shui, las cosas rotas roban la vitalidad e incitan a la tristeza y la depresión. Por consiguiente, lo mejor es deshacerse de ellas. Te recomendamos desechar tazas y platos astillados, ropas manchadas y cualquier objeto en desuso por su mal estado.
Esto no solo limpia la energía de tu casa sino también libera espacio y atrae la llegada de nuevas pertenencias.
Abre las ventanas
La naturaleza invoca una fuerza vital que colma los espacios de esperanza y tranquilidad. Abrir las ventanas y darle paso a la brisa, es una forma de que esta energía natural llene de gracia a tu hogar.
Esto es algo que recomendamos hacer todos los días, por lo menos durante unos minutos. Así, tu casa inhala un aire puro que la renueva y exhala toda la negatividad contenida.
Quema incienso
Quienes practican el feng shui aseguran que a medida que se queman las varitas de incienso, se consume la energía negativa. Principalmente, aquella que queda en el ambiente después de una discusión o un estallido de mal humor.
Otro de los beneficios de quemar incienso es que sus aromas terapéuticos relajan y promueven la sensación de paz y sosiego. De esta manera, se restauran las energías internas y externas.
Si practicas el feng shui con frecuencia, la fuerza vital del chi se mantendrá alta y equilibrada. A su vez, reducirás las malas vibras en tu hogar, por lo que aconsejamos dedicar algunas horas a la semana a estas actividades.